El secreto de las runas

Las runas forman parte de uno de los métodos adivinatorios más conocidos después de las cartas del Tarot y los distintos horóscopos. Muchos clarividentes se han entrenado en el poder de lectura de las runas y los mensajes ocultos que estos símbolos ofrecen a aquellos que tienen los ojos abiertos y entrenados para entender.

Los orígenes del sistema rúnico se remontan hasta 2000 años en el pasado, principalmente en el centro del continente europeo. La palabra runa tiene raíz protogermánica y proviene del término: ‘rugir’, aunque con el paso del tiempo fue evolucionando hasta formar el concepto nórdico antiguo ‘run’ (escrito secreto).

Una palabra inglesa antigua también tiene este significado: ‘run’ (secreto, misterio) y por eso las runas suelen ser identificadas con algo secreto o misterioso que es susurrado al oído para que solo aquellos involucrados puedan saber qué sucederá.

Los distintos tipos de sistemas rúnicos que existen se desprenden en su mayoría del celta. Estas fueron las primeras que existieron y le fueron entregadas al dios Odín. El nombre de runas celtas se les otorgó debido a la zona geográfica donde se encontraron las runas más antiguas, que pertenecía a este grupo de habitantes de la antigüedad y que se extendían por diferentes zona de Holanda, Suecia, Rumania e Irlanda.

Las runas se han utilizado desde tiempos remotos para realizar hechizos, invocaciones, curaciones y todo tipo de rituales mágicos.

Más información – El futhark antiguo, la lengua de las runas 
Fuente – Tarahill