Feng Shui; Los animales de la suerte

El antiguo arte chino de feng shui tiene como finalidad la armonización del hábitat a través de la atracción de buenas energías, que se traducirán en salud y prosperidad, para lo cual se vale de formulas y elementos destinados a lograr sus objetivos, entre los cuales se encuentran las figuras de animales, cuya finalidad es la protección y la atracción de la buena fortuna.

El Feng Shui utiliza a menudo pequeñas estatuas o imágenes de algunos animales como un símbolo de suerte, que traerá una solución rápida para la armonización de las energías que están fuera de equilibrio, en el hogar o lugar de trabajo, siendo uno de los animales más destacado la Rana de tres patas, que por ejemplo a menudo se coloca al lado de una caja registradora para aumentar el flujo de la energía monetaria.

En primer lugar se debe saber en qué lugares del hogar u oficina se deben colocar en función del fin que se persiga, como favorecer la carrera, las relaciones o la riqueza. Los animales para este arte milenario son poderosos símbolos tradicionales que harán nuestra vida personal y profesional más satisfactoria y exitosa, entre ellos mencionaremos los más destacados:

Dragón

Los Dragones tiene el poder de conferir la buena fortuna en cualquier lugar que se los ubique, pero sobre todo el familiar de la salud, a menos que se haya nacido en el año del perro, porque los perros son lo contrario de los dragones en la astrología china.

La rana de tres patas

Esta criatura de aspecto extraño pero encantador, de una rana con tres patas por lo general aparece sentada sobre una pila de monedas de oro o lingotes, siendo ubicada especialmente en fuentes de agua que fluye, lo cual potenciara la atracción del dinero, o se colocan al lado de una caja registradora, como mencionamos anteriormente.

Perros Fu

Estos perros se parecen a los leones estilizados y simbolizan prestigio y poder, que por lo general vienen en pares, debiendo colocarse a cada lado de las puertas, como un símbolo de protección.

Murciélagos

Los chinos consideran a los murciélagos como portadores de felicidad y buena fortuna, por lo cual un par de murciélagos traen doble felicidad.