My Haunted House: La madre de Eva (ojos negros)

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Eva sabía que estaba cambiando. Se estaba volviendo obsesiva, irascible y ella nunca había sido de esa manera. Por un lado sentía como si se estuviese volviendo loca, pero por el otro sentía que era esa locura la que podía traer respuestas a su vida.

Acababa de discutir una vez más con su novio. Habían planeado pasar unos días juntos en la casa y decidir qué hacer con ella, pero por motivos de trabajo la cita quedó para otra ocasión. Después de haberle gritado como una posesa y colgarle el teléfono, Eva se volvía a dar cuenta de que ese no era su comportamiento. Había algo en esa casa que la estaba cambiando cada vez más.

Entró al baño, abrió el grifo del lavabo y se refrescó la cara. Quería calmarse un poco. Cerró el grifo y con las manos en la cara se levantó. Estaba frente al espejo. Respiró hondo, se quitó las manos de la cara y abrió los ojos. Todo ocurría en apenas un segundo. El reflejo del espejo le mostraba a una Eva con los ojos totalmente negros. Eva se volvía a tapar la cara con las manos, temblando, sin entender lo que acababa de ver.

Más información – My Haunted House: La madre de Eva (una casa sin recuerdos)