Lo que se refleja en el espejo es el “otro”
Nuestra vida es como un espejo, todo se refleja en ella y ese reflejo me muestra que eso que se refleja soy yo.
Cuando efectuamos una acción de rechazo hacia una persona, nos estamos rechazando a nosotros mismos, pero no nos damos cuenta de esto.
Si somos sinceros podemos efectivamente ver que ese rechazo es a una parte mía que no reconozco y que no quiero ver y que sin embargo me pertenece y está allí conmigo a pesar de que la estoy viendo en el otro, si no fuera así me sería muy difícil de conocerla.
Carl Jung llamo a ese reflejo la “sombra”. Y la describió así porque proyectamos en los otros lo que no queremos ver en nosotros mismos. Es decir, hablamos de los otros, criticamos, rechazamos, en fin características que nos irritan y hasta nos hacen reaccionar en forma negativa, salen de nuestra persona. Al observarlas conscientemente nos podemos acercar a lo que tanto nos desagrada e iniciar un trabajo de aceptación en nosotros mismos.
Cuando somos conscientes de que la crítica, el rechazo, lo mal que calificamos a un semejante esta en relación directa con nosotros mismos, nuestra mirada se va volviendo más fina y la palabra y el pensamiento negativo, hacia el otros, también se va tornando más justo.
Le preguntaron en alguna ocasión a Mahatma Gandhi cuales son los factores que destruyen al ser humano. Él respondió así: “ La vida me ha enseñado que la gente es amable, si yo soy amable; que las personas están tristes, si estoy triste; que todos me quieren, si yo los quiero; que todos son malos , si yo los odio; que hay caras sonrientes, si les sonrío; que hay caras amargas, si estoy amargado; que el mundo está feliz, si yo soy feliz; que la gente se enoja , si yo soy enojón; que las personas son agradecidas, si yo soy agradecido. La vida es como un espejo: Si sonrío, el espejo me devuelve la sonrisa. La actitud que tome frente a la vida, es la misma que la vida tomará ante mí. El que quiera ser amado que ame.
La única razón por la que tú eres feliz es porque decides ser feliz….”