Ouija, un contacto con el mas allá

La misteriosa tabla Ouija ha persistido por más de 100 años, con devotos que van desde coleccionistas de placas antiguas a verdaderos creyentes en sus poderes místicos.

La ouija representa un verdadero dispositivo para contactarse con lo desconocido o el mundo de las almas, así dos personas se sientan frente a frente en una mesa para jugar sobre ésta placa rectangular compuesta por dos líneas curvas de letras, una encima de la otra, donde la fila superior va desde la A a la H y la fila inferior desde la N a la Z, e inmediatamente por debajo se extiende una fila de números que va desde el cero al nueve.

En la parte superior izquierda del tablero se encuentra la palabra Sí y en la parte superior derecha, la palabra No, así como en la parte inferior de la placa se ofrece una despedida, completando el diseño de la famosa Ouija.

Un objeto con forma de corazón y tres patas que le permiten deslizarse suavemente sobre la superficie, representa el dispositivo que marcará el posible contacto con un espíritu o alma que desee comunicarse con los convocantes, quienes deberán colocar suavemente sus dedos sobre el dispositivo y realizar las preguntas que deseen, esperando una respuesta.

De este juego misterioso se pueden esperar desde respuestas completas con fechas incluidas, como edades o épocas en las que vivió quien se contacta a simplemente un Si o un No a preguntas concretas.

La tabla Ouija también se conoce como la junta de brujas, es muy popular desde los años 1890 y 1950, décadas en las que docenas de fabricantes competían con diferentes versiones a veces diciendo que la Ouija era mucho más que un simple juego, para sacarle el máximo provecho, ya que en esas épocas estaba muy de moda el espiritismo, que no dudó en sugerir que la Ouija representaba un portal al mundo de los espíritus o del esoterismo, capaz de poner a uno en contacto a los muertos con los vivos y dejar a más de una persona, perpleja o aterrada con sus insospechadas respuestas.

Comunicarse con los muertos a través de médiums hizo furor en los Estados Unidos y Europa durante la última parte del siglo 19, tiempo en el que se llevaban a cabo sesiones en las cuales la gente se sentaba alrededor de una mesa, esperando a que los espíritus les hablaran y la mayoría de los contactos solo eran un plagio muy bien armado, que solo les robaba el dinero a los incrédulos.