Secretos de la Estatua de la Libertad
La Estatua de la Libertad en Nueva York representa un icono en todo el todo el mundo, sin embargo más allá de ser una obra de arte, lleva consigo muchos secretos.
Este símbolo nacional norteamericano es conocido en todo el mundo como la gran dama de amplia túnica y corona, que sostiene en alto una antorcha con una mano y con la otra sujeta una tableta inscrita con la fecha en números romanos, de la declaración de Independencia de su pais; 4 de julio de 1776 y a sus pies se encuentran cadenas rotas que simbolizan la libertad.
Su creador fue Frederic Bartholdi, escultor francés que según cuenta una historia cuando tenía 17 años, fue testigo de como una mujer con una antorcha trataba de prender fuego a una barricada, escena que jamás pudo olvidar y terminó plasmando en la Estatua de la Libertad.
Sin embargo otras historias cuentan que la esta gran dama fue creada para Egipto, algo que su creador negó una y otra vez. La estatua de la Libertad representó un símbolo de esperanza para los millones de inmigrantes que arribaron a los EE.UU., desde el 28 de octubre 1886.
Un dato histórico es que la mítica diosa de la Libertad ya era conocida en el siglo III aC por los romanos y fue empleada como símbolo de la libertad sobre la esclavitud, siendo representada como una figura vestida con un cetro, un gato y una jarra rota a sus pies, coronada con un gorro frigio, que fue otorgado a los esclavos cuando se les concedió su libertad.
El significado de la corona es un símbolo de la soberanía, honor, gloria y victoria, elevándose por encima de la cabeza que simboliza la idea de la preeminencia. Las coronas fueron utilizadas ya desde la antigua Roma y Grecia con hojas de árboles y bayas, a partir de allí fueron otorgadas como premios por logros deportivos, musicales o de servicios distinguidos al país, así como también los primeros cristianos adaptaron la corona a los mártires, que simboliza la victoria sobre las adversidades.
Imagen: flickr
Índice
Sé el primero en comentar